¿Es posible comer cebollas con pancreatitis o no?
Es difícil imaginar una dieta diaria sin cebollas. Las cebollas, las verduras y los puerros se consumen solos y se utilizan como ingredientes en varios platos. La verdura contiene aceites esenciales y vitaminas que se utilizan para tratar y prevenir una variedad de enfermedades.
Pero las cebollas no siempre son útiles. Las personas que tienen problemas con el sistema digestivo deben tener especial cuidado: comer cebollas en algunos casos causa complicaciones graves.
Del artículo aprenderá si es posible comer cebollas con pancreatitis, cómo es útil y dañino para el páncreas.
El contenido del artículo
Composición química
100 g de cebollas contienen:
- calorías - 40 kcal;
- grasa - 0,1 g;
- sodio - 4 mg;
- potasio - 146 mg;
- carbohidratos - 9 g;
- fibra - 1,7 g;
- azúcar - 4,2 g;
- proteínas - 1,1 g;
- vitamina E - 0,2 mg;
- ácido ascórbico - 7,4 mg;
- vitamina B6 - 0,1 mg;
- calcio - 23 mg;
- hierro - 0,2 mg;
- magnesio - 10 mg.
Las cebollas son ricas en vitaminas y sustancias volátiles que contienen azufre. Además, esta verdura contiene una alta concentración de vitamina C. Fortalece el sistema inmunológico y es indispensable en el tratamiento de los resfriados.
Los bulbos contienen fitoncidas, conocidos por su acción bactericida, azúcares, ácidos orgánicos y minerales.
¡Importante! Los científicos han descubierto el flavonoide quercetina en las cebollas. Esta sustancia acelera la descomposición de las grasas, ralentiza el crecimiento y la división de las células cancerosas.
100 g de cebolletas contienen:
- calorías - 32 kcal;
- grasa - 0,2 g;
- ácidos grasos - 1 g;
- carbohidratos - 7 g;
- fibra - 2,6 g;
- azúcares - 2,3 g;
- proteínas - 1,8 g;
- vitamina A - 333 mcg;
- ácido ascórbico - 18,8 mg;
- vitamina B6 - 0,1 mg;
- calcio - 72 mg;
- hierro - 1,5 mg;
- magnesio - 20 mg.
Las cebollas verdes son ricas en fibra, lo que mejora la digestión y tiene un efecto beneficioso sobre la motilidad intestinal. Las plumas verdes contienen fitoncidas. Estas sustancias tienen efectos asépticos y antibacterianos, por lo que se recomienda el uso de cebollas verdes durante los resfriados.
Las plumas también contienen vitaminas C, E y K, que están involucradas en fortalecer el sistema inmunológico, acelerar el crecimiento del cabello y mejorar el estado de la piel.
¡Importante! La más valiosa es la cebolla blanca y unos 10 cm de plumas verdes más cerca de ella. Es allí donde se concentran la mayoría de los nutrientes.
100 g de puerros contienen:
- calorías - 61 kcal;
- grasa - 0,3 g;
- ácidos grasos - 0,2 g;
- sodio - 20 mg;
- potasio - 180 mg;
- carbohidratos - 14 g;
- fibra - 1,8 g;
- azúcar - 3,9 g;
- proteínas - 1,5 g;
- vitamina A - 333 mcg;
- ácido ascórbico - 12 mg;
- vitamina B6 - 0,2 mg;
- calcio - 59 mg;
- hierro - 2,1 mg;
- magnesio - 28 mg.
El puerro es rico en sales de potasio. Estas sustancias actúan como diurético. Además, la cebolla normaliza el hígado y la vesícula biliar, mejora el apetito y previene la formación de cálculos renales.
Los gastroenterólogos recomiendan los puerros para las personas que padecen aterosclerosis, trastornos metabólicos, reumatismo, gota o exceso de trabajo.
Propiedades útiles de las cebollas.
Debido a la abundancia de vitaminas, así como macro y microelementos, las cebollas tienen un efecto beneficioso en todo el cuerpo:
- Su uso tiene un efecto beneficioso sobre el sistema digestivo.
- Esta verdura tiene propiedades quemagrasas, ayuda al cuerpo a digerir mejor los carbohidratos, mejorando así el metabolismo.
- Estimula la producción de insulina, enzimas digestivas, mejora la permeabilidad de los canales por donde ingresan al estómago.
- Tiene propiedades diuréticas, elimina el exceso de líquido.
- Tanto las cebollas como las cebolletas contienen un complejo de sustancias que aumentan el nivel de las defensas naturales del organismo y aportan la cantidad necesaria de vitaminas, macro y microelementos.
- En ausencia de contraindicaciones, la verdura se usa para prevenir resfriados.
- La fibra de la cebolla estimula la peristalsis intestinal.
- La verdura mejora la secreción de las glándulas del tracto digestivo.
- Tiene efecto antifúngico y antimicrobiano, se considera un antibiótico natural debido a los fitoncidas en su composición.
El efecto de las cebollas en el páncreas en la pancreatitis.
La pancreatitis es una inflamación del páncreas. Como todos los demás enfermedades del tracto gastrointestinal, la enfermedad impone serias restricciones a la dieta. Los pacientes deben seguir estrictamente la dieta prescrita por el médico para evitar el deterioro del tracto gastrointestinal.
Para elaborar un menú seguro, es necesario determinar la forma de la enfermedad. La pancreatitis es crónica y aguda. Este es el factor clave a la hora de prescribir una dieta.
Fase aguda
Muchos están interesados en saber si es posible o no comer con pancreatitis. cebolla, verde y puerro. Está estrictamente prohibido su uso durante una exacerbación. La razón es el alto contenido de aceites esenciales. Fortalecen el trabajo del páncreas, como resultado de lo cual el órgano secreta profusamente un secreto que corroe sus propios tejidos.
La fibra estimula la peristalsis y el aumento de la digestión también aumenta la carga sobre el páncreas. Esto conduce a una agravación del proceso inflamatorio.
Fase crónica
Cuando cede la exacerbación de la pancreatitis, comienza un período de remisión. Sucede:
- Inestable - los síntomas de la enfermedad están presentes, aunque en forma debilitada. El uso de cebollas es limitado. Esta es una condición inestable, cuando existe un alto riesgo de exacerbación de los procesos inflamatorios.
- Persistente - los signos desaparecen por completo. Durante este período, el menú se amplía significativamente. Se permite consumir cebollas cuando la enfermedad se vuelve crónica. A lo largo del mismo, el paciente debe adherirse a una dieta denominada "Tabla número 5".
Con pancreatitis crónica, se permite comer cebollas, pero con moderación. En este caso, es imperativo controlar el estado del páncreas. Si se atrofia y deja de secretar enzimas, el producto se excluye de la dieta. A veces, la verdura provoca una exacerbación repetida de la enfermedad. Entonces tienes que dejarlo.
Comer cebollas para la pancreatitis
En caso de inflamación en el tracto gastrointestinal, los productos que ingiera el paciente deben someterse a un tratamiento térmico. Pero no todos los métodos son adecuados para la pancreatitis.
Los médicos imponen una prohibición inequívoca de las cebollas fritas: al prepararlas, se usa una gran cantidad de aceite, que es extremadamente dañino en los procesos inflamatorios. Además, en la costra que se forma en el plato, se acumulan sustancias nocivas, carcinógenos, que provocan una exacerbación de la enfermedad.
Se sugiere asar como alternativa a freír. El proceso no requiere el uso de aceite en esta cantidad y le permite ahorrar más nutrientes.
Las cebollas hervidas se pueden comer después del inicio de la remisión. Se prepara como un plato independiente, agregado a sopas, salsas o salsas. Durante el tratamiento térmico, la cantidad de aceites esenciales en la verdura se reduce significativamente. Gracias a esto, se reduce su efecto nocivo sobre el páncreas.
Cuando se les pregunta si es posible comer cebollas guisadas con pancreatitis, los gastroenterólogos responden afirmativamente. En caso de remisión inestable, se recomienda agregarlo a guisos, sopas, platos de carne y pescado.
¡Importante! Antes de agregar cebollas al menú, asegúrese de consultar a su médico. Solo un especialista, según la condición del paciente, determinará con precisión si es seguro usarlo y calculará correctamente la dosis diaria permitida.
Comience con porciones pequeñas: no más de medio bulbo o 2-3 plumas verdes. Al mismo tiempo, controle cuidadosamente su bienestar y, si empeora, deje de usarlo.
Las cebolletas o cebollas se pueden usar como ingrediente en guisos, platos de carne, puré de papas o guisos.
Cuando esté en remisión, combine las cebollas con otros tipos de verduras.Con una ausencia prolongada de signos de la enfermedad, se permite comerlo incluso crudo.
Recetas de cebolla
Las cebollas se pueden hornear en el horno. Para ello necesitará:
- 5-6 cebollas medianas;
- 5 cucharadas l. aceite de oliva;
- sal al gusto.
Proceso de cocción:
- Las cebollas se cortan por la mitad y se colocan en una fuente para horno.
- Después de eso, espolvorearlos con aceite de oliva, agregar un poco de sal y mezclar.
- Hornee en el horno a 200 ° C hasta que se doren.
El puerro no tiene un sabor picante pronunciado ni un olor fuerte, como las cebollas o las cebolletas, por lo que muchas personas prefieren usarlo. Este producto es más popular en forma guisada.
Para preparar puerro guisado, debes:
- puerro - 2 piezas.;
- ajo - 3 dientes;
- cebollas - 1 pieza;
- pasta de tomate - 200 g;
- sal al gusto;
- aceite de oliva - 1-2 cucharadas. l.
Proceso de cocción:
- Picar finamente las cebollas o picarlas con una batidora.
- Póngalo en una sartén o cacerola engrasada, mezcle con la pasta de tomate y cocine a fuego lento durante unos minutos.
- Cortar el puerro en aros de aproximadamente 1 cm de grosor y picar el ajo.
- Agregue el ajo y el puerro a la sartén, sal y revuelva.
- Cocine a fuego lento la mezcla durante unos 20 minutos bajo una tapa cerrada.
Este plato se sirve con arroz hervido, carne o pescado. No olvide que la comida picante para la pancreatitis está prohibida, por lo que no puede agregar pimienta o condimentos similares.
¡Importante! Con pancreatitis, cualquier alimento frito está prohibido y las cebollas no son una excepción. Por lo tanto, no debe freírse, incluso si es un componente auxiliar de un plato, por ejemplo, una sopa o una guarnición.
Las cebollas son un producto tan versátil que incluso se elabora mermelada. Esto requiere solo las cebollas y el azúcar. Para 1 kg de vegetales, debe usar 2 cucharadas. Sáhara.
El proceso de elaboración de mermelada es extremadamente sencillo:
- Picar finamente la cebolla, espolvorear con azúcar y remover.
- Después de eso, cocine en la estufa o hornee en el horno hasta que se dore.
Daño y contraindicaciones
Las cebollas son un vegetal saludable, pero desafortunadamente, los pacientes con pancreatitis no siempre pueden usarlo.
Varios de sus componentes agravan en gran medida el curso de la enfermedad:
- Aceites esenciales. Estos compuestos agresivos irritan la membrana mucosa y estimulan la producción de jugo pancreático. Como resultado, el páncreas sufre la acción de sus propias enzimas.
- Polisacáridos y carbohidratos complejos. Estas sustancias están involucradas en la formación de fibra, cuyo contenido en las cebollas varía de 1,7 a 2,6 g por 100 g. Para digerir la fibra, los intestinos se ven obligados a trabajar duro. En el contexto de la pancreatitis, esto provocará diarrea, hinchazón y cólicos.
- Ácidos ascórbico, málico y cítrico. Estas sustancias son necesarias para que el organismo funcione correctamente, pero al mismo tiempo aumentan la secreción del páncreas.
- El jugo de cebolla tiene un efecto perjudicial sobre la vesícula biliar... Su uso provoca colecistitis.
Las propiedades antibacterianas de las cebollas no siempre son beneficiosas. Al destruir microbios y bacterias dañinos, el vegetal daña la microflora intestinal.
En algunos casos, las cebollas están categóricamente contraindicadas para pacientes con pancreatitis:
- Si el paciente tiene un ataque agudo. En este caso, el uso de cebollas se detiene inmediatamente y se consulta a un médico.
- Con graves alteraciones en el trabajo del páncreas. Si la glándula se ha atrofiado y casi no produce enzimas, es necesario endurecer la dieta excluyendo la verdura.
- Si durante la remisión ya ha habido exacerbaciones repetidas causadas por cebollas. Esto sucede especialmente a menudo durante la remisión inestable o si el paciente ha excedido la dosis del producto aprobada por el médico.
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Conclusión
Las cebollas son un vegetal saludable que contiene muchas vitaminas y minerales.Aseguran el pleno funcionamiento del cuerpo, tienen un efecto beneficioso en todos los sistemas y órganos. Pero para las personas que padecen enfermedades gastrointestinales, las cebollas pueden causar daños graves. En la pancreatitis crónica, utilícelo con precaución y extráigalo por completo de la dieta durante una exacerbación.